Isobel tiene miedo.
Tiene miedo a la esperanza, a creer que puedo ocurrir algo bueno.
Prefiere ser pesimista. Y no quiere temer a la desilusión de que algo malo ocurra. Porque a veces tener esperanza es tan doloroso
El otro día casi-casi la tuvo. Y luego se olvidó de ella. Pero hoy muy temprano se olvidó de la pesadumbre, y la esperanza se apoderó de su cuerpo. Luego de diez minutos debió de hacerse un auto-exorcismo para poder huir.
Es qué acaso debe creer que aquello será bueno?
O debe pensar que nada pasará porque si pasa se va sentir muy bien
quién sabe?
jueves, 13 de marzo de 2008
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